La retracción acentual del inglés. Datos acústicos en la adquisición de la L2 por parte de hispanohablantes

Gonzalo Eduardo Espinosa

Universidad Nacional del Comahue, Argentina
gonzaedward@hotmail.com

Trabajo recibido el 15 de mayo de 2020 y aprobado el 7 de octubre de 2020.

Resumen

Con el fin de estudiar el fenómeno de la retracción acentual en el inglés como segunda lengua (L2), en la presente investigación se lleva a cabo un análisis acústico de la duración, la intensidad y la frecuencia fundamental. Las mediciones incluyen casos con presencia y ausencia de choque acentual y casos de palabras con acento retraíble y no retraíble. Se computan datos obtenidos de manera experimental con aprendientes de inglés en contexto de instrucción formal y, con el fin de establecer un punto de comparación, con hablantes nativos del inglés estándar de Inglaterra. Teniendo en cuenta que los resultados indican que los hablantes nativos reflejan la retracción acentual (específicamente en términos de intensidad y altura tonal), los valores acústicos de los aprendientes de inglés no presentan el mismo comportamiento, ya que no hay evidencia robusta de desplazamiento de acento en palabras con acento retraíble. Los únicos aprendientes que realzan en alguna medida las sílabas inacentuadas son los del nivel intermedio, posiblemente debido a su instrucción reciente en fonética y fonología inglesa.

Palabras clave: retracción acentual, inglés, segundas lenguas, adquisición

Stress shift in English. Acoustic data in the acquisition of an L2 in native speakers of Spanish

Abstract

With the aim of studying stress shift in English as a second language, in this article the acoustic measurements of duration, intensity and fundamental frequency are analyzed in words with (non-)retractable stress in the presence and absence of stress clash. The production of instructed learners of English has been obtained and measured experimentally and eventually compared with that of native speakers from southeast England. Results indicate that the acoustic values in English native speakers reflect the presence of stress shift (specifically in terms of intensity and fundamental frequency). However, learners of English do not show the same behaviour due to the lack of robust evidence of stress shift in words with retractable stress. Probably due to their recent instruction on English phonetics and phonology, only learners with an intermediate level of language proficiency show higher values in some acoustic values of unstressed syllables, indicating a slight tendency for stress shift.

Keywords: stress shift, English, second languages, acquisition

A retração acentual do inglês. Dados acústicos na aquisição da L2 por falantes de espanhol

Resumo

Para estudar o fenômeno da retração acentual em inglês como segunda língua (L2), esta pesquisa realiza uma análise acústica da duração, intensidade e frequência fundamental. As medições incluem casos com presença e ausência de colisão acentual e casos de palavras com acento retrátil e não retrátil. Os dados obtidos experimentalmente são computados com alunos de inglês no contexto da ensino formal e, a fim de estabelecer um ponto de comparação, com falantes nativos de inglês padrão da Inglaterra. Tendo em mente que os resultados indicam que os falantes nativos refletem a retração acentuada (especificamente em termos de intensidade e altura tonal), os valores acústicos dos alunos de inglês não apresentam o mesmo comportamento, pois não há evidência suficiente de retração em palavras em que a retratação é possível. Os únicos alunos que produzem as sílabas fracas com mais proeminência até certo ponto são os do nível intermediário, possivelmente devido à sua recente instrução em fonética e fonologia inglesa.

Palavras-chave: retração acentual, inglês, segundas línguas, aquisição

1. Introducción

La fonología métrica postula una alternancia entre sílabas débiles y fuertes (Hayes 1995; Liberman y Prince 1977; Nespor y Vogel 1986; 1989). Sin embargo, cuando dos formas fuertes ocurren de manera contigua se produce el choque acentual, produciéndose un efecto de cacofonía en algunas lenguas. Los fenómenos fonéticos y fonológicos que ocasiona la adyacencia de dos acentos principales han sido estudiados en diversas lenguas. Para evitar el choque acentual, el inglés recurre a la retracción acentual o inversión yámbica de manera categórica (Gussenhoven 1991; Liberman y Prince 1977; Selkirk 1984), al igual que el italiano (Nespor y Vogel 1989) el portugués europeo (Frota 1995) y el portugués brasileño (Major 1985; Santos 2004).

El choque acentual se origina, por lo tanto, cuando dos acentos fuertes están contiguos en una misma cadena fónica, causando en muchas lenguas un reordenamiento prosódico a fin de lograr un habla más uniforme. En este reordenamiento puede darse la retracción acentual, en la que un acento principal se desplaza a una posición más temprana. En los siguientes ejemplos, (1) para el inglés y (2) para el portugués brasilero, se puede observar cómo el acento principal de la primera palabra (marcado con subrayado) se mueve hacia la izquierda cuando está seguido de una palabra que comienza con una sílaba fuerte:

(1) thirTEEN MENTHIRteen MEN1 (Liberman y Prince 1977)

(2) o José Maria canTOU HOjeo José Maria CANtou HOje (Santos 2004)

En español, la retracción no se ha demostrado experimentalmente (Almeida y San Juan 2001) y el choque acentual parece mantenerse de manera estable (Hualde 2010; Toledo 1998; Toledo y Gurlekian 2011). Si bien la retracción no es un fenómeno recurrente en español, es posible que la colisión de dos acentos fuertes tenga otro tipo de consecuencias como el debilitamiento de algún acento (Atria Lemaitre 2009; Pamies Bertrán 1994).

Entendemos el acento léxico principal como la emisión de una sílaba con un grado mayor de esfuerzo articulatorio y un grado de percepción mayor de prominencia (Morales-Front 2014, 236). Los principales correlatos fonéticos del acento son el tono, medido a través de los hercios de la altura tonal o frecuencia fundamental; la duración, cuantificada generalmente por medio de milisegundos; y la intensidad, medida en decibeles. Las lenguas del mundo presentan distintas preferencias por el tipo de correlato fonético que más sobresale en la percepción acústica de los acentos. Fry (1955) fue uno de los primeros en documentar los correlatos acústicos del acento al proponer la duración y la intensidad como las pistas más fiables para el acento del inglés. Para el español, Pamies Bertrán (1997) muestra evidencia en favor de la duración y la intensidad como los principales correlatos del acento, seguido por la altura tonal. Según Ortiz-Lira (2000) la altura tonal o tono podría ser el correlato más confiable para el acento léxico, aunque Ortega-Llebaria y Prieto (2010) demuestran que la duración parece ser el correlato más recurrente de manera translingüística.

Con respecto al inglés como segunda lengua (L2), existen investigaciones sobre el desplazamiento acentual con datos obtenidos de manera experimental por medio de análisis perceptuales (p. ej. Lai y Lin 2016, con hablantes nativos de mandarín; Schauffler, Zellers y Zerbian 2019, con hablantes nativos de alemán). Estos estudios logran mostrar que los hablantes no nativos de inglés presentan poco desplazamiento acentual en comparación con los nativos. Sin embargo, para poder corroborar los análisis perceptuales, prácticamente no existen trabajos acústicos que muestren la realidad fonética de este fenómeno en general, así como su manifestación en la adquisición en una L2. Un antecedente específico para la presente investigación es el de Keyworth (2014). Este autor ha investigado los correlatos acústicos en la retracción acentual del inglés como L2 por hablantes de mandarín y árabe como lenguas maternas. Su investigación se basa en los efectos que tienen ciertos morfemas en la ubicación del acento principal en palabras polisilábicas. Por ejemplo, la palabra HIStory presenta un desplazamiento acentual cuando se agrega el morfema -ic: hisTOric. Con informantes provenientes de Estados Unidos, Arabia Saudita y China y por medio de mediciones acústicas, este antecedente realiza un aporte sobre la jerarquía de correlatos físicos en el desplazamiento del acento léxico. Para los hablantes nativos de inglés, esta jerarquía estaría dada, de mayor a menor productividad, por la intensidad, la duración y la altura tonal. Con respecto a los hablantes no nativos de inglés, los nativos de chino mandarín desplazan el acento recurriendo en mayor medida a la intensidad y en menor medida a la altura tonal y la duración, sin diferenciar estos últimos dos correlatos. Por su parte, los hablantes nativos de árabe presentan una jerarquía de correlatos muy similar a la de los nativos de inglés: en primer lugar, se ubica la intensidad, le sigue la duración y, por último, la altura tonal. De esta manera, las manifestaciones acústicas de los acentos permiten analizar la transferencia de la lengua materna. Asimismo, según los datos del autor, existe una fuerte correlación entre cantidad de input de inglés recibida y la producción de los acentos. Es decir, a mayor desarrollo de la interlengua, los valores acústicos demuestran una cercanía a los parámetros de los hablantes nativos de inglés. Por lo tanto, en la acentuación no nativa del inglés, los tres correlatos acústicos (duración, intensidad y altura tonal) brindan información sobre el tipo de lengua materna y la cantidad de input que reciben los aprendientes.

La diferencia entre el inglés y el español resulta relevante para investigar la adquisición de la fonología en inglés como L2 por parte de hispanohablantes. Estos aprendientes deben adquirir la retracción acentual como una estrategia fonológica para evitar la ocurrencia de dos acentos fuertes contiguos y reordenar, así, los acentos principales para una distribución rítmica más uniforme. En el presente trabajo, estudiamos el fenómeno de la retracción acentual en hablantes nativos de inglés británico y en aprendientes de inglés cuya lengua materna es el español de la Argentina. Por medio de un estudio transversal, los datos acústicos de la duración, intensidad y altura tonal nos permitirán dar cuenta de cómo se desarrolla la interlengua en aprendientes de inglés que presentan distintos estadios de adquisición y que han recibido instrucción formal sobre lengua y fonología inglesa. En específico, buscamos observar cómo se refleja la retracción acentual en la información acústica y cómo ocurre la retracción acentual en distintos estadios de la interlengua del inglés. Organizamos este trabajo del siguiente modo: en la sección 2, brindamos los lineamientos metodológicos; en la sección 3, mostramos los resultados en conjunto con su correspondiente análisis; por último, presentamos algunas consideraciones finales (sección 4).

2. Metodología

2.1. Estímulo lingüístico

Para observar la retracción acentual, hemos seleccionado adjetivos bisilábicos del inglés con características acentuales a los fines de la presente investigación. Por un lado, generamos estímulos lingüísticos con dos contextos prosódicos: con ocurrencia y con ausencia de un choque acentual. Por el otro, para cada uno de estos contextos y siguiendo la pronunciación contemplada en Wells (2008), subdividimos las palabras bisilábicas en dos grupos: con acentuación retraíble y con acentuación no retraíble, tal como lo hicieron Grabe, Warren y Nolan (1994). Es decir, comparamos palabras con acento final que se puede retraer (p.ej. ChiNESE→ CHInese) con palabras que tienen acento final que no puede presentar un desplazamiento del acento principal (p.ej. reVERSE). Todos estos pares de palabras se insertaron en una oración sostén con sentido. Se obtuvieron 4 contextos prosódicos teniendo en cuenta las distintas comparaciones acentuales. La tabla 1 muestra los contextos prosódicos y los pares de palabras empleados en cada uno.

Con choque acentual

Sin choque acentual

Retraíble

Contexto A

Contexto C

unKNOWN PROcess

ChiNESE CHILdren

thirTEEN STUdents

well-FORMED SENtence

dark-BLUE PICture

reBUILT MARket

fareWELL DINner

unKNOWN discrimiNAtion

ChiNESE communiCAtion

thirTEEN pronunciAtions

well-FORMED imagiNAtion

dark-BLUE illumiNAtion

reBUILT determiNAtion

fareWELL appreciAtion

No retraíble

Contexto B

Contexto D

reVERSE PROcess

maTURE CHILdren

poLITE STUdents

preCISE SENtence

aCUTE PICture

corRUPT MARket

corRECT DINner

reVERSE discrimiNAtion

maTURE communiCAtion

poLITE appreciAtion

preCISE pronunciAtion

aCUTE imagiNAtion

corRUPT determiNAtion

corRECT illumiNAtion

Tabla 1: Pares de palabras del estímulo lingüístico.
Nota: Las mayúsculas indican el acento principal de las palabras pronunciadas de manera aislada y el subrayado representa el acento secundario. Las palabras analizadas acústicamente se indican con recuadros.

Como indica la tabla 1, los adjetivos bisilábicos retraíbles (p. ej. chiNESE → CHInese) se hallan en contexto de choque acentual cuando les sigue una palabra con acento principal en la primera sílaba (p. ej. CHILdren), y en contexto de ausencia de choque, cuando el sustantivo que sigue comienza con una sílaba inacentuada (p. ej. communiCAtion). Del mismo modo, las palabras que no son proclives a presentar retracción acentual (p. ej. reVERSE → reVERSE) también se encuentran en contexto de presencia y ausencia de choque acentual. Cabe señalar que para los contextos sin choque acentual se eligieron palabras de 5 sílabas (que se analizaron acústicamente) cuya primera sílaba es siempre débil con los sonidos /i/, /ə/ o /ɪ/, la segunda con acento secundario, la cuarta con acento principal y la tercera y quinta con niveles de acentuación débil. De esta manera, se aseguró que no haya un choque acentual entre los acentos principales porque entre éstos hay 3 sílabas, de las cuales la del medio corresponde al acento secundario. Todas las palabras se encontraban en oraciones sostén con el propósito de estimular su producción en medio de una frase entonativa y, de este modo, evitar efectos de pausa en los correlatos acústicos. (Véase el apéndice con la totalidad de los estímulos.)

2.2. Informantes

Los informantes de esta investigación (N=28) han sido cuidadosamente seleccionados teniendo en cuenta sus características sociolingüísticas. Por un lado, para llevar a cabo un estudio transversal, se seleccionaron 3 grupos de aprendientes de inglés (n=21) en contexto de instrucción formal, cuya primera lengua es el español hablado en la Patagonia, Argentina. Así, contamos con aprendientes iniciales (grupo A), intermedios (grupo B) y avanzados (grupo C), cuya clasificación se basó en la cantidad de instrucción recibida en el ámbito universitario y en las calificaciones obtenidas durante el proceso de evaluación. Por otra parte, con el fin de contrastar los resultados de inglés no-nativo, se seleccionó un grupo de nativos monolingües de inglés británico (n=7).

Todos los aprendientes de inglés comenzaron el proceso de adquisición formal del inglés después de la pubertad en colegios secundarios públicos o en institutos privados de inglés. Todos comenzaron a estar expuestos a la lengua meta de manera significativa cuando ingresaron a la carrera del Profesorado o Traductorado en Inglés en la Universidad Nacional del Comahue. El grupo A (5 mujeres y 2 hombres) corresponde a estudiantes principiantes, con una edad al momento de la entrevista promediando los 20,7 años. Han tenido un promedio de 9,7 meses de instrucción en lengua inglesa y de 10 meses de instrucción en fonología inglesa. De 37 instancias evaluativas (10 orales), las notas alcanzaron un promedio de 7,1/10 en lengua y de 8,1/10 en fonología. El grupo B (3 mujeres y 4 hombres), por su parte, está conformado por estudiantes que se encontraban en la mitad de sus carreras universitarias. Han tenido 3 años y medio2 de instrucción en lengua inglesa y 3 años en fonología inglesa. Las notas promedio eran de 7,75/10 en lengua y de 7/10 en fonología. Estas notas provienen de 103 instancias evaluativas, de las cuales 25 son instancias orales. Por último, el grupo C (4 mujeres y 3 hombres) está compuesto por estudiantes avanzados de las carreras universitarias. La edad promedio en la entrevista era de 28 años. La instrucción formal en lengua alcanzó casi los 7 años y la de fonología, 3 años y 2 meses. De un total estimado de 160 instancias evaluativas (40 orales), las notas promedio en el área de lengua eran de 6,6/10 y en fonología de 7,2/10.

Los informantes nativos (4 mujeres y 3 hombres) corresponden a hablantes de zonas de Londres y Gran Londres cuya lengua materna es el inglés. Con respecto a las segundas lenguas, los informantes señalaron un muy buen nivel de portugués, tibetano y gaélico, mientras que en algunos casos declararon poseer un nivel básico de francés, español, árabe y danés. La edad promedio al momento de la entrevista era de 25 años. Todos se encontraban cursando o habían culminado alguna carrera universitaria. La mayoría de sus padres o tutores tenían trabajos profesionales.

2.3. Procedimiento

Las grabaciones se llevaron a cabo en salas especiales de grabación. Los aprendientes de inglés se grabaron en diversas salas de la Universidad Nacional del Comahue, sede General Roca, Argentina, mientras que los informantes nativos de inglés se grabaron en University College de Londres, Inglaterra. Los micrófonos empleados fueron Rode NT1-A, Rode NT2-A y CAD GXL2200. Durante las grabaciones, se contaba con algunas diapositivas en las que se mostraba el estímulo lingüístico para ser leído en silencio y corroborar el entendimiento de todas las oraciones. Posteriormente, los participantes leían las oraciones en distintas diapositivas en las que ellos podían controlar la transición. Para cada informante se obtuvo un archivo de audio WAV mono con una frecuencia de muestreo de 44.100 Hz y una cuantificación de 16 bits. En las muestras de habla se segmentaron las sílabas a analizar por medio de Praat (Boersma y Weenink 2019). La segmentación se llevó a cabo teniendo en cuenta, principalmente, los lineamientos generales consultados en Fuchs (2016), Mairano y Romano (2011) y White y Mattys (2007). Para la división en sílabas se tuvo en cuenta el dominio de la palabra y se siguió la regla del ataque [Maximal Onset Principle], favoreciendo los ataques por sobre las codas. Los límites de vocales se basaron en la estabilidad de los formantes, en especial del segundo formante. Por su parte, se tuvieron en cuenta los descensos de intensidad para identificar los límites de consonantes en general, el tercer formante para la aproximante /r/ y el comienzo y cese de la fricación en el caso de fricativas.

Para el análisis de los acentos principales ―y por ende de la retracción acentual―, se midieron los parámetros de la duración en milisegundos (ms), la intensidad en decibeles (dB) y la altura tonal en hercios (Hz). La intensidad se normalizó en todos los audios, evitando la saturación. Para eliminar diferencias fisiológicas entre los informantes, como la diferencia entre hombres y mujeres, la altura tonal se normalizó convirtiendo los valores de hercios a semitonos (ST). El corpus obtenido corresponde a un total de 1568 sílabas (7 palabras × 2 sílabas × 4 contextos × 28 informantes). Para automatizar la tarea de medición, se emplearon scripts de Praat. Los valores acústicos obtenidos se tabularon según las distintas variables y luego se procedió al análisis estadístico descriptivo e inferencial (ANOVA) con el programa InfoStat (Di Rienzo et al. 2008).

3. Resultados y discusión

A continuación, presentamos los resultados para cada parámetro acústico teniendo en cuenta los distintos contextos de acentuación. Por un lado, mostramos los contextos con choque acentual: contexto A (retraíble) y contexto B (no retraíble); por el otro, los contextos sin choque acentual: contexto C (retraíble) y contexto D (no retraíble).

En la figura 1, mostramos los valores promedio de los tres parámetros acústicos en el contexto A en todos los informantes.

Figura 1. Valores de duración, intensidad y altura tonal en el contexto A (choque acentual y acento retraíble), in=sílaba inacentuada; ac=sílaba acentuada; A=aprendientes iniciales; B=aprendientes intermedios; C=aprendientes avanzados; N=nativos. Los valores en gris corresponden a casos de retracción. *Diferencias significativas: F=4,4; p=0,0386.

En la figura 1.1, observamos que la sílaba acentuada presenta valores mayores que la sílaba inacentuada en todos los grupos de informantes, lo que se interpreta como una ausencia de desplazamiento en términos de duración. Sin embargo, el grupo de nativos presenta una diferencia de 21 ms, a diferencia de los otros grupos en los que la diferencia fue mayor: grupo A=80 ms, grupo B=90 ms y grupo C=88 ms. Esto se interpreta como una diferenciación menor entre los dos niveles de acentuación en los nativos, pero mayor en los no-nativos. Es decir, el choque acentual y el contexto retraíble podrían provocar una atenuación en cómo la duración marca distintos grados de acentuación, al menos en los hablantes nativos. Con respecto a la intensidad, la figura 1.2 muestra que el grupo de informantes nativos acentuó la sílaba inacentuada con un promedio de 72 dB, mientras que la sílaba acentuada se manifiesta con un promedio de 70 dB, es decir, hay un desplazamiento del acento principal de 2 dB. Este valor es un tanto relevante si se tiene en cuenta que 3 dB es un umbral significativo para que el oído humano detecte un cambio de acentuación (cfr. Ortega-Llebaria y Prieto 2010). Además, la diferencia entre las sílabas es estadísticamente significativa (F=4,4; p=0,0386). En los aprendientes, el único grupo que mostró un leve desplazamiento fue el grupo B con una diferencia de 1 dB. Finalmente, la figura 1.3 indica que los nativos de inglés presentan desplazamiento acentual en términos de altura tonal: la sílaba acentuada presenta un promedio de 87,6 ST, mientras que la sílaba inacentuada lo hace en 88,1 ST. Es decir, se observa una leve retracción de 0,5 ST hacia la sílaba inacentuada, aunque este valor no es significativo en la comunicación, dado que es menor al umbral de 1,5 ST y no logra ser perceptible (cfr. Colantoni, Hualde e Icardo Isasa 2019). Con respecto a los hablantes no-nativos, si bien ninguno de los grupos realza la sílaba inacentuada, podemos observar las diferencias de semitonos entre las dos sílabas. Estos datos indican que el grupo que menos diferencia presenta entre las sílabas es el grupo B con 0,62 ST más en la sílaba acentuada, le sigue el grupo A con 0,83 ST y, por último, el grupo C con 1,36 ST.

Los resultados de la figura 1 demuestran que los únicos informantes que producen un desplazamiento del acento principal son los nativos. Este desplazamiento se manifiesta principalmente a través de la intensidad y la altura tonal. La duración no es un indicador de la retracción acentual, pero presenta valores más similares entre la sílaba acentuada y la inacentuada, al menos cuando la duración se compara con los valores de los no-nativos, quienes muestran un realce mucho mayor en la sílaba acentuada. Podríamos suponer que, en los nativos, la retracción acentual se refleja en mayores valores de intensidad y altura tonal en la sílaba inacentuada y, además, en valores similares de duración entre sílaba inacentuada y acentuada. Los aprendientes de inglés, en general, no logran un desplazamiento del acento principal, aunque el grupo intermedio se aproxima en mayor medida a los valores de los hablantes nativos del inglés, logrando un leve desplazamiento en cuanto a los valores de intensidad.

Con respecto al contexto B, adjetivos no retraíbles ante choque acentual, la figura 2 muestra los resultados de los 3 parámetros acústicos en todos los informantes. En la figura 2.1, observamos que la duración indica que la sílaba acentuada presenta un valor evidentemente mayor a la sílaba inacentuada en los 4 grupos de informantes. La intensidad en la figura 2.2, por su parte, presenta los mismos valores para ambas sílabas en todos los informantes. Por último, en la figura 2.3, la altura tonal es levemente mayor en la sílaba acentuada que en la inacentuada. Esta tendencia se observa en todos los informantes. Por lo tanto, los resultados en el contexto B demuestran que no se produce ningún tipo de desplazamiento acentual.

Figura 2. Valores de duración, intensidad y altura tonal en el contexto B (choque acentual y acento no retraíble), in=sílaba inacentuada; ac=sílaba acentuada; A=aprendientes iniciales; B=aprendientes intermedios; C=aprendientes avanzados; N=nativos.

La figura 3 muestra los resultados del contexto C, palabras con acento retraíble ante ausencia de choque acentual. En la figura 3.1, observamos que la duración se realza levemente en la sílaba acentuada en todos los informantes. Los informantes que muestran menos diferencia (17 ms) entre la sílaba acentuada e inacentuada son los nativos. En un menor a mayor grado de diferenciación, le siguen los aprendientes de grupo B (69 ms), grupo A (72 ms) y grupo C (89 ms). Con respecto a la intensidad (figura 3.2), los nativos de inglés desplazan levemente la intensidad a la sílaba inacentuada en 1 dB. Los aprendientes, en cambio, no demuestran desplazamiento del acento, conservando los mismos valores en ambas sílabas (grupos A y B) y realzando la sílaba acentuada (grupo C). Por último, la figura 3.3 muestra que la altura tonal solamente se desplaza hacia la sílaba inacentuada en los informantes nativos, con una diferencia de 1,06 ST. Los aprendientes, por su parte, realzan siempre la sílaba acentuada, siendo el grupo B el que menos diferencia presenta entre la sílaba acentuada e inacentuada (0,08 ST), seguido por el grupo A (1,01 ST) y el grupo C (1,05 ST). En suma, la figura 3 indica que ocurre un desplazamiento del acento principal en términos de intensidad y altura tonal solamente en los informantes nativos.

Figura 3. Valores de duración, intensidad y altura tonal en el contexto C (sin choque acentual y con acento retraíble); in=sílaba inacentuada; ac=sílaba acentuada; A=aprendientes iniciales; B=aprendientes intermedios; C=aprendientes avanzados; N=nativos. Los valores en gris corresponden a casos de retracción.

Por último, la figura 4 muestra los resultados del contexto D, con palabras no retraíbles ante ausencia de choque acentual. En la figura 4.1, observamos que todos los informantes producen un realce mucho mayor en la sílaba acentuada en términos de duración. La intensidad (figura 4.2), por su parte, muestra un realce mayor en la sílaba acentuada de los nativos (3 dB), mientras que los aprendientes presentan diferencias menores (grupos B y C) o no presentan diferencias (grupo A). En la figura 4.3, la altura tonal presenta un realce en la sílaba acentuada de todos los informantes. Como resultado general del contexto D, los datos indican que no se produce un desplazamiento acentual en los casos en que no hay choque acentual de adjetivos no retraíbles.

Figura 4. Valores de duración, intensidad y altura tonal en el contexto D (sin choque acentual y con acento no retraíble); in=sílaba inacentuada; ac=sílaba acentuada; A=aprendientes iniciales; B=aprendientes intermedios; C=aprendientes avanzados; N=nativos.

4. Consideraciones finales

La retracción acentual en el presente estudio se ha analizado acústicamente en datos obtenidos de manera experimental con informantes nativos y no-nativos de inglés. Nuestros resultados indican que el fenómeno de la retracción solamente se observa, en mayor medida, en los hablantes nativos y, en menor medida, en algunos aprendientes de inglés. En los contextos en los que se produce o podría producirse un desplazamiento del acento, los parámetros acústicos que reflejan este fenómeno son la intensidad y la altura tonal (y no la duración), al menos según la información obtenida con los nativos de inglés, quienes demuestran retracción acentual cuando la sílaba tónica está seguida de una palabra que comienza con sílaba tónica (contexto A) o que comienza con una débil seguida de un acento secundario (contexto C). La duración, sin embargo, no se observa con valores mayores en la sílaba inacentuada, pero en los contextos de palabras con acentos retraíbles (contextos A y C), todos los grupos de informantes —y, en mayor medida, los nativos— presentan las menores diferencias de duración entre los distintos tipos de sílabas, es decir, las sílabas acentuada e inacentuada presentan una duración más similar. Se podría suponer que la duración acompaña o refuerza los otros dos parámetros en los casos de acentos retraíbles. Asimismo, esta jerarquía de valores acústicos representa un aporte sobre cuál es la manifestación física del desplazamiento acentual. Keyworth (2014) llega a la conclusión de que la retracción acentual en inglés se refleja primero en la intensidad, luego en la duración y, por último, en la altura tonal. Sin embargo, nuestros datos indican que la intensidad y la altura tonal son los principales correlatos acústicos, y la duración refleja la retracción en menor medida. Probablemente, la diferencia en la jerarquía de valores se deba al tipo de retracción analizada. Mientras en Keyworth (2014) la retracción está dada por el agregado de sufijos, en nuestra investigación se da por el choque acentual en palabras contiguas. De todos modos, podemos concluir que la intensidad parece ser el indicador más confiable —o más sensible— para dar cuenta de la retracción.

En cuanto a los aprendientes de inglés, los únicos informantes que logran algún grado de realce en las sílabas inacentuadas (producto de una posible retracción acentual) son los del grupo B. Esto se observa en los valores de intensidad en los casos con choque acentual y palabras retraíbles (contexto A), con intensidad mayor en la sílaba inacentuada, y en los valores de altura tonal, que presenta menos diferencia entre la sílaba acentuada e inacentuada. Asimismo, en los casos en los que no hay choque acentual y hay palabras retraíbles (contexto C), los informantes del grupo B han logrado posicionarse más cerca de los hablantes nativos, en el sentido de que presentan una diferencia menor entre sílabas acentuadas e inacentuadas en términos de duración y altura tonal. Con respecto al grupo A, sus datos acústicos presentan los valores más lejanos del grupo de hablantes nativos del inglés, posiblemente porque se evidencia una cercanía mayor al comportamiento acentual del español debido a la transferencia de la lengua materna y la falta de retracción en esta última (p. ej. Almeida y San Juan 2001; Hualde 2010; Toledo y Gurlekian 2011). Por su parte, el hecho de que los aprendientes intermedios hayan mostrado una mayor cercanía a los valores de los nativos podría explicarse por su reciente instrucción en fonética y fonología inglesa (cfr. Sección 2.2). Es probable que el conocimiento explícito y el entrenamiento sobre la pronunciación del inglés hayan tenido un impacto en el mejor desempeño de estos informantes. En consecuencia, se podría suponer que los aprendientes avanzados presentan algún tipo de desvanecimiento de sus conocimientos y habilidades lingüísticas a largo plazo (cfr. Espinosa 2018, sobre el mismo contexto de adquisición).

Así como el aporte de Keyworth (2014) sobre el inglés hablado por hablantes de mandarín y árabe, nuestro trabajo ha permitido dar cuenta de la retracción acentual por medio de valores acústicos y ha permitido describir el inglés como L2 en hablantes de español en distintos estadios de adquisición. Los datos obtenidos en la presente investigación constituyen una contribución para profundizar los estudios sobre el desarrollo del sistema fonológico de una L2 en contexto de instrucción formal. Para tal fin, con un análisis acústico de la producción, se podría medir el desempeño en aprendientes que han tenido otro tipo de entrenamiento fonológico, no solo de la retracción acentual, sino cualquier otro aspecto prosódico. Por último, siguiendo los planteos de, por ejemplo, Bohn (2017), Carlet (2017) y Espinosa (2019), resultaría fundamental explorar el efecto de instrucción a largo plazo, tanto en la percepción como en la producción, y el fenómeno de atrición en la fonología de segundas lenguas.

Bibliografía

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Apéndice

Nota: las palabras subrayadas son las que se analizaron acústicamente en el presente estudio. Las mayúsculas indican niveles mayores de prominencia.

CON CHOQUE ACENTUAL

A) Retraíble (XX + Xx → XX + Xx)

1. The company undergoes an unKNOWN PROcess these days.

2. We have some ChiNESE CHILdren in the school.

3. We have welcomed thirTEEN STUdents this semester.

4. John has written a well-FORMED SENtence in his notebook.

5. Mary prefers the dark-BLUE PICture on the new wall.

6. I went to the reBUILT MARket in my neighbourhood.

7. We are invited to a fareWELL DINner tonight.

B) No retraíble (xX + Xx; la primera vocal del adjetivo no es acentuable por ser siempre débil)

1. This is the reVERSE PROcess of the plan.

2. Teachers have more maTURE CHILdren at school.

3. Teachers want some poLITE STUdents in the class.

4. I need a preCISE SENtence for the speech.

5. Peter looks for an aCUTE PICture of the city.

6. Clients avoid the corRUPT MARket in the country.

7. We think of the corRECT DINner for the guests.

SIN CHOQUE ACENTUAL

C) Retraíble

1. Some minorities still suffer from unKNOWN diSCRImiNAtion these days.

2. These activities are really effective for ChiNESE comMUniCAtion in business.

3. You can identify more than thirTEEN proNUNciAtions of your name.

4. Fairy tales stimulate the well-FORMED iMAgiNAtion of children.

5. The room now has the dark-BLUE ilLUmiNAtion for relaxation.

6. John is OK thanks to his reBUILT deTERmiNAtion after the accident.

7. The old team enjoyed a fareWELL apPREciAtion in December.

D) No retraíble

1. There are cases of reVERSE diSCRImiNAtion in society.

2. Reading improves your maTURE comMUniCAtion anywhere.

3. The planet needs our poLITE apPREciAtion of nature.

4. I need to know the preCISE proNUNciAtion of these names.

5. The magic in stories inspires the aCUTE iMAgiNAtion in children.

6. Every citizen can see the corRUPT deTERmiNAtion of the system.

7. We have decided on the corRECT ilLUmiNAtion of the living room.


1 Las mayúsculas indican el acento principal en ambas palabras.

2 Éstos corresponden a años académicos de 8 meses de duración.