3. GUÍA DE ESTILO

Los lineamientos de estilo utilizados por la revista ARQUEOLOGÍA se basan en los parámetros definidos por las normas APA 7ma edición (2019). A continuación, se detallan algunas consideraciones generales que deben ser tenidas en cuenta a la hora de preparar los manuscritos:

3.1. Abreviaturas y silabeo: no utilizar abreviaciones ni separar las palabras en sílabas al final del renglón.

3.2. Uso de siglas y acrónimos: para el uso de siglas en el texto es necesario que previamente se exprese el título o frase completa seguida de la sigla utilizada entre paréntesis. De esta manera, las menciones subsiguientes a esta referencia solamente harán uso de la sigla (p.ej. Noroeste Argentino [NOA] o Universidad de Buenos Aires [UBA]). No utilizar siglas en la cita de las instituciones editoras de las referencias bibliográficas. Los nombres de asociaciones, corporaciones y editoriales de universidades deben escribirse completos. No se aceptará el uso de siglas o abreviaciones para la denominación de puntos cardinales, tales como NW o SE, debiéndose de la siguiente forma: Noroeste, Sudeste.

3.3. Siglas y abreviaturas preestablecidas: solamente se aceptará el uso de abreviaturas y siglas sin desglose en el caso de elementos de uso extendido. De esta manera, se acepta el uso de abreviaturas para unidades de medida (p.ej. g, kg, mm, cm, m, m2, m3, km, m s.n.m.) y expresiones abreviadas de uso corriente (p.ej. et al., etc., cal., ca., cf., v.g., e.g., óp. cit.).

3.4. Siglas propias de la disciplina: en cuanto a las denominaciones específicas de uso extendido en la disciplina arqueológica, se aceptan las siguientes: AP (antes del presente); BP (before present); A.D. (anno Dómini); a.C. (antes de Cristo); d.C. (después de Cristo); AMS (Accelerator Mass Spectrometry); TL (Termoluminiscencia); MNI (Minimum Number of Individuals) y NISP (Number of Individual Specimens).

3.5. Mayúsculas y minúsculas: consignar con minúscula las áreas y accidentes geográficos genéricos (p.ej. río, golfo, bahía, valle, lago, laguna, cuenca, humedal, región, etc.), las denominaciones geográfico-políticas (p.ej. localidad, departamento, provincia, etc.) y las referencias genéricas a puntos cardinales (p.ej. “Recorrimos el norte de la región”). Consignar con mayúscula las denominaciones geográficas específicas (p.ej. Pampa, Puna, Patagonia), el nombre de períodos cronológicos particulares (p.ej. período Tardío, período Agroalfarero temprano, Holoceno medio) y las referencias absolutas a puntos cardinales (p.ej. La brújula señalaba el “Este”).

3.6. Subíndices y superíndices: utilizar subíndices solamente para la denominación de determinados compuestos químicos de forma abreviada (p.ej. CaCO3, H2O, C3). Utilizar superíndices únicamente para: a) insertar notas en el texto; b) indicar magnitudes exponenciales y c) expresar isótopos estables y radiactivos de elementos químicos (p.ej. m3, km2, 14C).

3.7. Itálicas o cursivas: utilizar solamente para la expresión de palabras de origen extranjero o de nombres científicos.

3.8. Números cardinales y ordinales: en la redacción del texto, los números cardinales por debajo de nueve en el texto deben ser expresados con palabras, mientras que los números cardinales por encima de nueve deben ser expresados en números arábigos. Por su parte, los números que encabezan una oración y los números ordinales deben expresarse con palabras (p.ej. “Quinientos años atrás…” o “El análisis de la tercera muestra…”).

3.9. Números decimales: utilizar coma para separar los decimales (p.ej. 0,25).

3.10. Números de más de tres cifras: en los números de más de tres cifras utilizar punto para la separación de las unidades de mil (p.ej. 5.000; 10.000), con excepción de: a) las edades radiocarbónicas de más de cuatro dígitos (p.ej. 2500 AP), b) los dígitos binarios, c) los números de serie, d) los valores de temperatura y frecuencias acústicas y e) los números de página. De esta manera, solo se utilizarán puntos como separación de miles en conteos de materiales (p.ej. “1.235 lascas”) y altitudes (p.ej. 2.300 m s.n.m.).

3.11. Edades radiocarbónicas: las edades radiocarbónicas sin calibrar (AP) estarán seguidas por el error estándar (±) de 1 (un) sigma, consignando también la sigla y número de análisis del laboratorio. En estos casos se debe aclarar siempre el tipo de material que se dató (p.ej. madera, carbón, hueso).

3.12. Edades calibradas: las edades calibradas siempre deben ser identificadas como tales utilizando las convenciones en español (p.ej. cal a.C. o cal d.C). Los autores/as deben mencionar la calibración particular utilizada, indicando si la misma fue hecha con uno o dos sigmas, y presentar la edad calibrada como un rango de la edad calendario (o rangos, cuando más de uno es posible). Si existe más de un rango posible de la edad calendario y el programa de calibración le asigna probabilidades a cada uno, estas probabilidades deben ser incluidas. A modo de ejemplo, para el fechado 3680 ± 60 AP los dos posibles rangos de edades son 2279-2232 cal. a.C. (p = 0,05) y 2209-1905 cal. a.C. (p = 0,95) (Calibrado a 2 sigmas con el programa CALIB 2.0; Stuiver y Reimer 1986). Si en el manuscrito se incluyen varios fechados calibrados, se aconseja presentarlos en forma de Tabla.

3.13. Coordenadas geográficas: las coordenadas geográficas presentadas en el texto o en las Tablas de los manuscritos solamente deberán incluir grados (°) y minutos (ʹ), omitiéndose por completo el dato correspondiente a los segundos (ʺ). Esta política remite a la necesidad de proteger la integridad y evitar la exposición pública de las localizaciones arqueológicas específicas.